La estadounidense Serena Williams, número uno del tenis femenino, necesitó más de tres horas de partido y tirar de épica para doblegar a la rusa Vera Dushevina (6-7(2), 7-6(5) y 7-6(5)), que desperdició un punto de partido para apear del torneo de Madrid a la primera favorita.
La tenista de Florida, ganadora este año del Abierto de Australia, en el que elevó a 36 el número de premios acumulados a lo largo de su carrera, estuvo contra las cuerdas en su debut en la Caja Mágica. Perdió el primer parcial en el desempate y también estuvo cuesta arriba el segundo. Tuvo que salvar un punto de partido que dispuso su rival para llevar también la manga al tie break, lo que le devolvió al enfrentamiento.
Tiró de experiencia en la tercera manga.
Pidió auxilio físico a las asistencias y se marchó al vestuario, de donde regresó vendada en el muslo izquierdo, minutos después, para reconducir el partido.
Dushevina, cuarenta del mundo y con un sólo título en su palmarés, el del año pasado en Estambul y otras tres finales de las que salió malparada, nunca volvió la cara a la situación. Tenía cerca doblegar a la estadounidense por primera vez en su carrera. En los dos enfrentamientos anteriores, en Miami en el 2005 y en Sídney esta temporada, siempre salió derrotada. Y con claridad.
Serena Williams encarriló el tercer set (5-2), pero la jugadora rusa reaccionó y equilibró el marcador (5-5) para recuperar el equilibrio en el partido y llevar la situación a otro desempate. Tuvo de cara el duelo Dushevina, que se situó con 4-0 en el tie break definitivo. Le tembló el pulso y la número uno del mundo no desperdició la ocasión para sumar seis puntos seguidos y el duelo a su lado, que cerró a la segunda oportunidad.
