El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, rechazó ayer la propuesta europea para ayudar a Irán a producir energía nuclear a cambio de suspender el enriquecimiento de uranio, e insistió en que Teherán "no renunciará a sus derechos".
"Creen que están tratando a un niño al que pueden pedir que le de su oro a cambio de chocolate", dijo el líder ultraconservador iraní en un discurso que pronunció ante miles de personas en la ciudad de Arak, en el centro del país.
Su declaración se produce dos días después de que los ministros de Exteriores del UE-3 -Francia, el Reino Unido y Alemania- informaran a sus colegas europeos en una reunión en Bruselas sobre un plan de incentivos a Irán.
Este plan se complementa con medidas coercitivas en caso de que Teherán siga sin cumplir con las exigencias del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
"Cómo se atreven algunas naciones a engañar al pueblo de Irán prometiendo incentivos para impedir su desarrollo científico?", se preguntó Ahmadineyad. También aseguró que el pueblo iraní "se esforzará para conseguir sus derechos.
PROPUESTAS
La República Islámica está dispuesta a ofrecer "incentivos económicos a Europa si apoya sus derechos".
Además exige que la propuesta europea reconozca el derecho iraní a desarrollar actividades nucleares para fines pacíficos, incluido el enriquecimiento de uranio.
También quieren que Europa ayude a su país a "conseguir estos derechos".