La Comunidad Internacional reaccionó ayer al máximo nivel ante el asalto israelí contra la llamada "Flotilla de la libertad", que pretendía llevar ayuda humanitaria a Gaza y que fue repelida en una operación en la que han muerto entre 9 y 20 personas, según las fuentes.
Israel ha reconocido la muerte de nueve activistas, pero fuentes periodísticas indican que puede haber entre 14 y 20 muertos, así como entre 30 y 60 heridos en el asalto, llevado a cabo por comandos de elite israelíes en aguas internacionales, a unas veinte millas de la Franja de Gaza.
La Casa Blanca se declaró "preocupada" por el ataque israelí, aunque rehusó condenarlo, si bien lo calificó de "incidente" y "tragedia".
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, dijo ayer que los soldados israelíes que atacaron una flota de embarcaciones con activistas que se dirigían a Gaza en aguas internacionales "actuaron para proteger sus vidas".
Egipto y Jordania, los dos únicos países árabes que mantienen relaciones diplomáticas con Israel, convocaron hoy a los embajadores israelíes en El Cairo y Ammán para comunicarles su protesta.
A petición de Líbano y Turquía - país del que partió hacia Gaza buena parte de la flotilla y donde está radicada la ONG IHH, que organizó el envío de ayuda a Gaza- el Consejo de Seguridad de la ONU se reunió ayer con carácter de urgencia para tratar de la magnitud de este incidente.
La reunión se produce después de que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidiera a Israel "una explicación urgente" y "una investigación completa" de lo sucedido frente a las costas de Gaza.
La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, ha pedido a las autoridades israelíes una "investigación completa" sobre el asalto, aunque no ha querido interpretar el incidente en términos políticos ni señalar culpables por el momento, indicó uno de sus portavoces.
Por otro lado, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía reaccionó ayer duramente al ataque de Israel a los barcos turcos de la flota internacional con destino a Gaza, que ha causado al menos 14 muertos, según la televisión israelí.
Ese ministerio, que agrega en un comunicado que el Gobierno israelí tendrá que enfrentarse a las consecuencias por su comportamiento, ha establecido un centro de crisis para seguir el desarrollo de los acontecimientos.
El comunicado ministerial dice que el Ejército israelí ha usado la fuerza contra un grupo de ayuda humanitaria, incluidos "ancianos, mujeres y niños" que viajan en los barcos, lo que consideró "inaceptable".
Mientras la Comunidad Internacional le pide explicaciones a Israel por su acción, en todo el mundo miles de personas se manifiestan y condenan el ataque a la flotilla que llevaba ayuda humanitaria a Gaza, pueblo que sufre un bloqueo por parte de Israel y Egipto desde hace tres años.
Chile, Brasil y México han mostrado su rechazo enérgico al ataque a la flotilla en sendos comunicados, Brasil por su parte pidió explicaciones al embajador israelí en su territorio, sobre una ciudadana brasileña que viajaba en la flota.