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Pineda muestra huellas del delito.  |
El Centro de Salud Juan Antonio Núñez, ubicado en la calle 9 Amador Guerrero, fue blanco de una bala explosiva que sorprendió a sus más de 50 funcionarios la mañana de ayer lunes. Se desconoce el móvil.
Aurelio Pineda, director del Centro de Salud, informó que en la mañana- cuando abrieron las puertas para empezar a laborar- se encontraron con los vidrios y fragmentos de la balas en el piso.
Una de las ventanas de la parte trasera del Centro de Salud estaba destruida con huellas de un disparo, hasta la cortina tenía los orificios de la munición.
"Una bala perdida puede matar a uno de los funcionarios o a los pacientes, más de 300 por día se atienden... por eso debemos buscar un mecanismo para controlar el problema ", dijo Pineda. |
