La Asamblea Nacional de Diputados aprobó ayer un proyecto que autorizaría al Ministerio Publico para vender, donar o enajenar bienes procedentes del narcotráfico, lavado de dinero y terrorismo. La iniciativa surgió debido al deterioro que sufren las propiedades, autos y embarcaciones aprehendidas a sospechosos de delitos relacionados con drogas, las cuales a veces son blanco de actos vandálicos, robo y daños por efecto del tiempo y la falta de mantenimiento adecuado.
Con las cuentas bancarias no hay mayor problema, debido a que pueden permanecer congelados en una institución financiera, pero las dificultades surgen cuando se trata de otros bienes. Los informes indican que ya hay más de 1,000 vehículos incautados. Ahora los tribunales podrán otorgar la tenencia provisional de esos bienes hasta tanto se decida la causa. Cuando se trate de bienes perecederos o que puedan dañarse, el funcionario de instrucción podrá donarlos a instituciones de beneficencia o venderlos a la mayor brevedad posible y el dinero debe ser depositado en un Fondo de Custodia.
Sin embargo hay una realidad, los bienes perecederos son los de menor cuantía, porque el grueso de las incautaciones son los bienes inmuebles y cuentas bancarias.
Se estima que en las Fiscalías de Drogas hay bienes incautados valorados en 100 millones de dólares. El problema del deterioro de las propiedades del narcotráfico, no es sólo en Panamá. En Colombia, donde los jefes de los Carteles de Medellín, Cali y Norte del Valle, ha acumulado fortunas y mansiones producto de la venta de cocaína, las propiedades en manos del Estado, también sufren el daño producto del paso del tiempo.
Ojalá que la iniciativa aprobada logre aliviar un tanto la situación que es compleja.