El poderoso huracán "Dennis" impactó la costa sur de Estados Unidos, entre Florida Panhandle y Alabama, con inusitada furia propia de un ciclón categoría cuatro.
El fenómeno, cuyos vientos eran de casi 240 kilómetros por hora, comenzó a castigar con fuertes vientos y oleaje y copiosas lluvias la costa estadounidense del golfo de México.
El Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. (CNH), con se de en Miami, informó que "Dennis", convertido en las últimas horas de nuevo en un poderoso huracán de categoría cuatro en la escala Saffir-Simpson (de cinco grados) pasó entre Pensacola y Mobile, Alabama, en una región conocida como Panhandle.
"Este es un huracán muy, muy peligroso", advirtió el director del CNH, Max Mayfield.
Las autoridades ordenaron la evacuación de cerca de 1, 4 millones de personas que viven en zonas bajas en el noroeste de Florida y en el sur de Alabama, Misisipi y Louisiana, donde sus autoridades han declarado el estado de emergencia.
El fenómeno atmosférico ha dejado sin energía eléctrica y teléfono a decenas de miles de personas en el sur de la Florida desde la noche del viernes, además de derribar numerosos árboles, señales de tráfico y postes del tendido eléctrico, principalmente en Cayo Hueso, aunque no ha causado víctimas.
El primer huracán de la temporada ciclónica en el Atlántico Norte se fortaleció el sábado al entrar a las aguas cálidas del golfo de México tras azotar Cuba con vientos superiores a los 240 kilómetros por hora, donde dejó al menos diez muertos, y Jamaica y Haití, donde al menos hubo cinco muertos y cuatro desaparecidos.
"Dennis" es el primer huracán de una temporada que, nada más iniciarse, ya batió una marca histórica al formarse cuatro tormentas tropicales ("Arlene", "Bret", "Cindy" y "Dennis", convertida en ciclón) en sus primeros 36 días.
Asimismo "Dennis" es el huracán más poderoso desde que se tienen registros históricos que se ha formado en el mes de julio, y ya ha dejado al menos una veintena de muertos y desaparecidos a su paso por Jamaica, Haití y Cuba.