Las cartas están sobre la mesa. Los educadores lanzaron una nueva propuestas donde sí aceptan bajar el aumento, pero bajo la condición de que el Ministerio de Educación aumente unos dólares más su ofrecimiento.
Los docentes, aglutinados en el Frente de Acción Magisterial (FAM) y en la Coordinadora Nacional de Unidad Magisterial (Conuma) iniciaron su lucha en favor de un aumento de 190 dólares hace cuatro meses. Nadie los hacía cambiar de opinión hasta este fin de semana deciden ceder bajo ciertas condiciones. Ambos, tanto el FAM como la Conuma, proponen al Gobierno 100 dólares de aumento, en vez xe los 190 que habían propuesto.
Según los docentes, ellos se han bajado y esperan que el Gobierno acepte esta nueva propuesta para poner fin de la amenaza de huelga, pero antes el gobierno debe aumentar su propuesta de 65 dólares.
Al iniciarse a penas el primer día de vacaciones de los estudiantes, lo educadores buscan una salida sabrosa a la crisis, pero todo dependerá si el Ministerio de Educación acepta, pues, si no es aceptada, a penas reinicien las clases, después del periodo de descanso, la lucha la llevarán a las calles.
Ambas partes deben buscar esta semana el punto de equilibrio. Todos sabemos que en una negociación siempre se pide lo más alto para después negociar algo menor. Este truco es viejo y al menos los docentes esperan que se aplique a ellos, pero lo más recomendable es sentarse y discutir cifras y no imponer una en particular para después negociar bajo ciertas condiciones. Esta no es la norma de la democracia donde el libre juego de ideas debe imperar para sacar a flote al país.