|
EDITORIAL
El a�o 2000 ha sido aciago para los periodistas
El publicista y periodista N�stor D�az G�mez, el comunicador Orlando Kivers De Le�n, la profesora Eulogia R. de Arias, el vers�til artista Adolfo Le�n Riera (Mano Barijto) y el arquitecto Hern�n Botello Montalv�n son los nombres de los periodistas que dejaron huellas y que la parca traidora se llev� vistiendo de luto el periodismo nacionial. La profesora Eulogia R. de Arias escribi� en varias revistas y diarios su columna ventanales. Due�a de una prosa de fina sensibilidad, tambi�n fue directiva del Sindicato de Periodistas de Panam�. Fue homenajeada por la Asociaci�n de Egresados de la Universidad de Panam� junto con cuatro meritorios colegas. Adolfo Le�n Riera, conocido con el nombre art�stico de "Mano Barijto", se destac� en el periodismo radial donde sus comentarios fueron altamente apreciados. Instituy� un periodismo cr�tico con su personaje del campesino desarraigado y perteneciente a las masas irredentas de nuestro pa�s. Tambi�n trabaj� en la televisi�n y su personaje trascendi� hasta M�xico, donde fue C�nsul General. Orlando Kiver De Le�n fue jefe de redacci�n y director de varios diarios de la localidad. Fue un periodista completo y perteneci� a la junta directiva del gremio de Prensa. Trabaj� la mayor parte de su vida en peri�dicos de oficinas p�blicas, ya que por muchos a�os, fue jefe de Relaciones P�blicas del Ministerio de Salud. Finalmente la prematura partida del maestro del periodismo deportivo Hern�n Botello Montalv�n llena una p�gina de dolor por su sensible deceso. "Nan" fue locutor en radio y televisi�n, periodista de la prensa escrita y director del programa Domingo Deportivo que se transmit�a por Canal 4 en la d�cada del setenta y �ltimamente el vocero deportivo, que se perifoniaba por Radio Anc�n. Estas son las p�rdidas irreparables que ha tenido hasta el momento el periodismo nacional. Adi�s colegas. Que la tierra les sea leve. �Paz a sus almas!. Una generaci�n de relevo de periodistas est� comprometida a seguir sus pasos, porque el mejor legado de estos comunicadores desaparecidos ha sido practicar un periodismo con honradez y eficiencia. En el viaje a la mansi�n de la eterna realidad estos cinco periodistas dejan polvo de estrella.
|
PUNTO CRITICO |
 |
|
|
|
