La baja presión que se convirtió en depresión tropical provocando inundaciones en las provincias de Chiriquí, Panamá, Veraguas, Coclé, Herrera, y Bocas del Toro, podría disiparse en las próximas 18 horas, informó ayer la jefa del departamento de Hidrometeorología de la Empresa de Transmisión Eléctrica (ETESA), Luz Graciela Calzadilla.
"Está depresión tropical ha comenzado a desplazarse hacia el noroeste, es decir, hacia Nicaragua, y Guatemala, pero las probabilidades no son tan altas de que se puedan convertir en una tormenta, si en su recorrido toca tierra", señaló.
Según la experta en meteorología, este tipo de depresiones tienen un movimiento ciclónico, cuyas bandas externas provocarían lluvias al sur de Veraguas, Chiriquí, la península de Azuero, y Costa Abajo de Colón.
La metoróloga aseguró que mientras más rápido se disipe la depresión, las condiciones climáticas mejorarán cosiderablemente.
Finalmente la funcionaria hizo un llamado a la ciudadanía, para que se mantengan alejados de los ríos y playas, y dejen de practicar la cultura del riesgo.
Por su parte, el ministro de Vivienda, Carlos Duboy, dijo que se reubicará a las personas afectadas del distrito de Soná en Veraguas porque esta es un área inundable y es necesario que se trasladen.
"Se le dará respuestas a las 84 familias y en el próximo Consejo de Gabinete presentare la situación al Presidente de la República, Ricardo Martinelli para que se empiece a construir las viviendas lo más pronto posible", aseguró.
En tanto, las oficinas de la Dirección de Bienes y Donaciones del Despacho de la Primera Dama han permanecido abiertas desde el pasado sábado 31 de octubre, para atender las necesidades de las familias afectadas por las lluvias y el desbordamiento de los ríos y quebradas en diversas regiones del país.
El Despacho de la Primera Dama procedió con la entrega de bolsas de comida, colchones, frazadas, kit de limpieza y de aseo personal, entre otras ayudas.