Pedro Rem�n, sindicado por supuestamente fraguar un atentado contra el presidente Fidel Castro, denunci� desde su encierro en la c�rcel El Renacer la violaci�n de sus derechos humanos.
Seg�n Rem�n, la dilataci�n del proceso de audiencia ordinaria constituye una acci�n discriminatoria, producto de las "acciones represivas, campa�as de mentiras y presiones pol�ticas y econ�micas" de parte del gobierno de Cuba.
Sostuvo que la "campa�a de intimidaci�n, chantaje y difamaci�n" ha provocado que las autoridades judiciales paname�as hayan dilatado por espacio de tres a�os la realizaci�n de la audiencia ordinaria en este caso.
"No podemos, ni debemos permitir que se d� otra violaci�n de nuestros derechos por demoras intencionales en los tr�mites, que puedan cancelar de nuevo la celebraci�n de la audiencia", dijo.
El cubano manifest� que no existen pruebas en el sumario "que produzca certeza jur�dica" que lo vincule a la comisi�n de los hechos punibles investigados contra la integridad f�sica del presidente Castro. La audiencia de este caso ha sido fijada para los d�as 21, 22 y 23 de enero del pr�ximo a�o.
Rem�n plante� la posibilidad que el grupo de cubanos que los apoya interpongan una denuncia formal ante la Comisi�n Interamericana de Derechos Humano (CIDH) en Washington.
EN ESPERA DE JUICIO PARA ENERO
Julio Berr�os, abogado querellante en el proceso judicial contra Rem�n y los otros anticastristas, anunci� que ser� en enero pr�ximo la audiencia para sentenciar a los implicados en varios delitos.
"No tengo dudas, ser�n condenados", recalc� el doctor Berr�os, al comentar la decisi�n del juez de situar la diligencia para el 21de enero contra Luis Posada Carriles, Guillermo Novo, Gaspar Jim�nez, Pedro Rem�n, C�sar Matamoros y Ra�l Rodr�guez.
Los complotados, seg�n La Habana y los denunciantes izquierdistas, intentaron colocar una bomba de grandes proporciones en el Paraninfo de la Universidad paname�a en los momentos en que el presidente de Cuba, Fidel Castro, dictar�a una conferencia ante m�s de dos mil personas, en el marco de las actividades paralelas que realizaria el l�der cubano durante la X Cumbre Iberoamericana, realizada en noviembre del a�o 2 000.
El frustrado intento de magnicidio iba a ser ejecutado con poderosos explosivos C-4, PETN y RTX, los cuales son de uso militar y no se encuentran a la venta p�blica ni existe libre acceso a su adquisici�n en el Istmo.
De acuerdo con pruebas contundentes presentadas para apuntalar los descargos de los abogados querellantes, adem�s del expediente de Posada Carriles; Rem�n fue sindicado por el asesinato en plena calle de Manhattan de un diplom�tico cubano en Naciones Unidas. Por supuesto, este �ltimo rechaza la acusaci�n. |