Las fiestas de Navidad y de fin de año vienen acompañadas de excesos. Excesos de gastos, de tráfico, y por supuesto, en lo que se come y se bebe.
Durante estas fiestas no faltan las bebidas ni tampoco la intoxicación provocada por el consumo excesivo de alcohol.
Las conocidas resacas son tan comunes como el jamón y el pavo que se degustan en la época. Sus efectos y malestares se manifiestan al día siguiente.
Para que usted pueda celebrar en grande y no sufrir de los dolores de cabeza, náuseas y mareos, los expertos recomiendan lo siguiente:
- No beba sin antes comer. Si lo hace, todo el alcohol que entra en el cuerpo es absorbido por el organismo y la resaca es peor.
- No fume mientras bebe. El humo del cigarrillo empeora los efectos del alcohol al día siguiente.
- Beba mucha agua. Es recomendable tomar grandes cantidades de agua durante el día, con el objetivo de que el organismo se encuentre hidratado al momento de la fiesta, lo cual ayuda a evitar la concentración de alcohol en el cuerpo. También es recomendable intercalar vasos de agua entre copa y copa.
- Rehidratarse. Tomar mucha agua al momento de acostarse, cuando se regresa de la fiesta y al despertarse al día siguiente. También es recomendable tomar leche al despertar.
- Consumir alimentos líquidos. Tomarse una sopa o un caldo e ingerir zumos de fruta que contengan vitamina C, como naranja, mandarina, limón, tomate o zanahoria.
- Vitamina B12. Si el malestar es demasiado intenso, se puede ir a la farmacia y comprar pastillas que contengan esta vitamina, la cual ayuda al organismo a absorber el alcohol rápidamente.
- Descansar. Una de las mejores soluciones es mantener el cuerpo en reposo y dormir para ayudar al organismo a recuperarse del desgaste que ha sufrido.
- Baño caliente y ducha fría. Llenar la bañera de agua caliente y agregar jabón líquido cítrico o de algas, sumergirse por unos 15 minutos y luego ducharse con agua fría. Los efectos relajantes y revitalizantes que se obtienen con este método son estupendos.
