Corea del Norte le exigió el miércoles a Estados Unidos una disculpa por haberla llamado ``enclave de la tiranía'' y amenazó con reanudar pruebas de misiles de largo alcance.
Sin embargo, Pyongyang también planteó la posibilidad de regresar a las conversaciones sobre desarme nuclear si Washington accede a coexistir con el país comunista.
Corea del Norte declaró el 10 de febrero que poseía armas atómicas y que boicotearía las conversaciones entre seis naciones que buscaban acabar con sus ambiciones nucleares.
Alrededor de esa fecha, mencionó que el hecho de que la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, hubiera calificado al país como uno de los ``enclaves de la tiranía'' del mundo mostraba que Washington no ha abandonado su política ``hostil'' hacia Pyongyang, desde que el presidente estadounidense George W. Bush incluyó por primera vez al país en su grupo del ``eje del mal'', junto con Irán y el Irak anterior a la guerra.
``Estados Unidos debe disculparse por sus afirmaciones y retirarlas, renunciar a su política hostil que busca un cambio de régimen en la República Popular Democrática de Corea y aclarar su disposición política para coexistir en paz con la RDPC y demostrarlo en la práctica'', afirmó la cancillería norcoreana en un memorándum, empleando el acrónimo del nombre formal del país.
El comunicado atribuyó a Bush el uso de los calificativos de ``eje del mal'' y ``enclave de la tiranía''.
El memorándum -cuya esencia fue difundida en un despacho en inglés por la agencia noticiosa oficial norcoreana, KCNA- afirmó que Corea del Norte ``participará en las conversaciones en cualquier momento, siempre y cuando Estados Unidos asuma una actitud confiable y sincera y proporcione las condiciones y la justificación para reanudar el diálogo entre seis países''. �Pedirá disculpas Estados Unidos?