La corregiduría de Guadalupe impidió la edificación de cinco nuevas casas dentro de los terrenos pertenecientes a la Cantera de El Coco.
Se informó que los propietarios pretendían construirlas en un área donde se programa realizar voladuras con cargas de dinamita.
La destrucción de las casas se realizó cuando solo habían sido colocadas algunas estacas a modo de columnas.
Sumaya Cedeño, representante del corregimiento, indicó que el año pasado se llegó a un acuerdo entre el Municipio y la empresa que administra el yacimiento, para acondicionar el terreno adonde serán trasladadas las familias que ya viven en el lugar.
El terreno donde serán trasladados se ubica en el sector de Potrero Grande.