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Cinco jueces escoceses comenzaron a escuchar ayer la apelación del ciudadano libio condenado por el atentado aéreo de Lockerbie, ocurrido en 1988. Se estima que esta instancia judicial, que se desarrollara en un tribunal escocés con sede en Camp Zeist, Países Bajos, durará hasta seis semanas.
Tras un proceso de nueve meses, Abdelbasset Ali Mohammed Al Megrahi fue hallado culpable de colocar la bomba que hizo estallar el vuelo 103 de Pan Am sobre la localidad de Lockerbie y causó la muerte a 270 personas.
Al Megrahi fue sentenciado a cadena perpetua en enero de 2001, con la recomendación de los jueces de que cumpla al menos 20 años de la pena. En junio de 2001, Al Megrahi presentó una apelación contra su condena. Hasta el momento se desconocen los argumentos que utilizará en las audiencias.
Sin embargo, uno de sus asesores legales comentó a la BBC que la apelación se enfocará en la evidencia de un testigo clave: Tony Guaci, un tendero maltés.
Guaci señaló a Al Megrahi como el hombre que compró ropa para colocar alrededor del explosivo, pero los jueces admitieron que no realizó una identificación "absolutamente positiva" ni en el tribunal ni por medio de fotografías.
Los abogados también indicaron que buscarán nuevas pruebas sobre presuntas fallas de seguridad en el aeropuerto de Heathrow, en Londres, la noche antes de atentado.
Un empleado de esa terminal aérea dijo que informó a la policía sobre una irrupción en la sala de almacenamiento de equipaje de Pan Am. Los tres jueces que actuaron en el proceso contra Al Megrahi reconocieron que la maleta-bomba comenzó su viaje en un avión proveniente de Malta y que en Francfort fue transferida a otro vuelo que conectaba con el 103 de Pan Am en Heathrow. |
