Los anuncios de que desde la medianoche de ayer una parte de la vía Transístmica sería cerrada, al parecer no llegó a oídos de los conductores, ya que muchos de ellos se mostraron sorprendidos por la medida que se tomó para montar la tarima principal de los carnavales capitalinos.
El embotellamiento era enorme y varios conductores se quejaron por la falta de información, ya que según ellos, desconocían de la medida.
Unidades de la Dirección de Operaciones del Tránsito y de la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT) trataban de hacer un milagro y agilizar el tráfico, lo cual era imposible, ya que las largas filas no terminaban.
Un conductor que se identificó como Eduardo Him, en tono molesto, dijo que toda la culpa la tiene el Gobierno por no cambiar la ruta de las festividades, provocando este despelote en las calles.
Lamentó que se haya escogido un día de mucho trabajo para empezar a colocar esta tarima y reconoció que mañana será peor, ya que la vía será cerrada por completo.
RUTAS
Los que venían de la ciudad y se dirigían hacia la Transístmica, tenían dos opciones: desviarse hacia la Tumba Muerto o hacia la Ave. Manuel Espinosa, que sale a la Iglesia del Carmen. Para estos, la cura era peor que la enfermedad, ya que tenían la opción de irse hacia vía Argentina o El Cangrejo, rutas que no ofrecían mayores posibilidades de avance a los conductores.
HABLA LA AUTORIDAD
El comisionado Juan Herrera de la Dirección de Operaciones del Tránsito (DOP) reconoció la razón de la población por el tranque e hizo un llamado para que hoy, que la situación se agudizará, traten de tomar vías alternas para evitar estos malos ratos.
Recordó que las unidades del tránsito están haciendo todo lo posible para agilizar el tráfico en el sector, pero recordó que los trabajos que se hacen en otras áreas, que podrían usarse como desahogo, han complicado la situación.
CIERRE TOTAL
Hoy la Transístmica estará cerrada desde el puente de la Cervecería hasta El Ingenio, y no será hasta el próximo miércoles cuando la ruta vuelva a la normalidad.