Ya las empresas contratadas para realizar las auditorías a los Corredores Norte y Sur han completado su labor. De salida el ministro de Economía nos desayuna con que las concesionarias ICA Panamá y PYCSA, no han recuperado su inversión y la ganancia garantizada por el Estado panameño.
Los panameños pagan algo más de $2.50 cada vez que utilicen toda la ruta de los Corredores Norte y Sur. La idea era cubrir esa distancia en 20 minutos, pero se paga y se sufren tranques en las horas picos. Las empresas se han tomado las vías de las barriadas como acceso a esas carreteras. Todo eso sucede a ciencia, paciencia y complacencia de los gobiernos.
Una de las empresas ha hecho un gran negociado con la venta de los terrenos del antiguo aeropuerto de Albrook y los rellenos de Punta Pacífica más el cobro de peajes. El Corredor Sur incluyó una inversión de $222.3 millones y debía obtener ganancias por $84.1 millones.
En la otra acera está PYCSA, la compañía que construyó el Corredor Norte y dejó a medias el autopista a Colón. Los gobiernos le han patrocinado adendas tras adendas, que siempre han sido incumplidas. Provocó una demora de más de una década la terminación del tramo Madden a Colón por lo que hubo que traspasarla a otra empresa. Las extensiones del Corredor han sido mal construidas o no se han completado.
La inversión inicial de $328.8 millones con una ganancia de $62 millones y monto recuperable de $390.9 millones pasó luego a una inversión de $423.1 millones y un monto recuperable de $503.1 millones.
Se pensaba que con las auditorías se frenaría toda esa complacencia, pero con los avances ya la comunidad está pensando que ese slogan de que "Ahora le Toca al Pueblo", era un mero show publicitario.