El ministro José Raúl Mulino acusó al CEN del PRD de intentar boicotear la reunión de hoy a la 1: 00 p.m. entre el mandatario Ricardo Martinelli y los ex presidentes Mireya Moscoso, Martín Torrijos y Ernesto Pérez Balladares.
Dijo que el CEN "mandó la línea" a sus representantes de corregimiento para que protesten y cierren calles en distintos puntos del país para desvirtuar la reunión con los ex mandatarios.
La declaración de Mulino se produjo cuando llegaba a la ciudad de Las Tablas a una reunión del Consejo Provincial de Coordinación y se encontró con un cierre de calle que realizaban los representantes del PRD de esa provincia, quienes reclaman los desembolsos de $170 mil dólares del Programa de Desarrollo Social, que administra el Ministerio de Economía y Finanzas.
"Es una planificación política para empañar la reunión con los ex presidentes, porque pareciera que al CEN no le interesa hablar de temas nacionales", indicó el funcionario.
A estos señalamientos, el secretario del PRD, Mitchell Doens, pidió a Mulino no acusar al PRD de querer "prender el rancho", según dijo, porque de eso se ha encargado el propio presidente Martinelli con los antecedentes de la "Ley Chorizo", ley de minería y los hechos de Changuinola.
Descartó que las protestas de los representantes de corregimiento tenga que ver con alguna doble intención de empañar la reunión de Martinelli con los ex presidentes.
"Una cosa no tiene que ver con la otra, pero si mezclarlas
hace feliz al ministro Mulino.. que así sea", agregó el opositor.
Doens afirmó que apoya la protesta y el reclamo de la partida de $170 mil de los representantes de corregimiento, porque el Gobierno ha estado dando un trato discriminatorio a los representantes del PRD o que no son parte de la alianza oficialista.
A criterio del dirigente del PRD, "el rancho está ardiendo hace rato y por eso Martinelli quiere hablar con los ex presidentes".
Por su parte, el representante de corregimiento de San Francisco, Carlos Pérez Herrera, manifestó que varios miembros del partido son del criterio de que de esa reunión con los ex presidentes "no saldrá nada bueno, pero que esa percepción no es motivo para que se planifique una protesta el mismo día del encuentro".