Decenas de niños, hombres y mujeres que viven en varias comunidades lejanas del corregimiento de Gatú del distrito de Santa Fe se quedaron sin respuesta y a diario ponen en riesgo sus vidas al cruzar caudalosos ríos, cuyos puentes fueron destruidos por las crecidas durante la reciente estación lluviosa, además tienen pérdidas en la producción agrícola y vivienda del área.
Natividad Urriola, residente en esta aparatada comunidad, comentó que una 70 familias de ese sector aún no logran reponer el trauma de las ventolinas y las lluvias que afectó meses atrás sus sistema de vida como lo es la producción del café, cuyos cultivos quedaron arrasados de raíces, igual que los cultivos de porotos, naranjas, plátanos, es decir casi todo.
Familias enteras perdieron sus cafetales y otros cultivos no tienen ahora como sobrevivir, tenían la esperanza de subsidios y apoyo gubernamental alimentario hasta recuperarse, sin embargo, nunca llegaron, solo los primeros días llegó algo de provisiones, pero no lo suficiente para tantas personas que no tienen como sostenerse.
Urriola dijo que aún la mayor preocupación para los cientos de personas que viven en Gabú, Gatuncito, Honduras, San José y otras es que los puentes fueron destruidos por las crecidas no se han reparado y ya empiezan arreciar los aguaceros que originan las inundaciones y las personas, sobre todo los niños, a diario utilizan los mismos para ir a la escuela.
Con este problema, muchas comunidades se quedarán incomunicadas, para no tener el riesgo de que un niño muera ahogado, los padres de familias han optado por no enviarlos a la escuela, igualmente los adultos para no sufrir un accidente o morir en las aguas de estos ríos prefiere caminar largas horas para salir a Chitra o a Calobre.
Los puentes peatonales destruidos se construyeron bajo la gestión del representante de corregimiento Natividad Urriola, y se logró con ello salvar muchas vidas.
La producción de café, porotos, naranjas, legumbres, frijoles, yuca, ñame, entre otras, es fructíferas en estas apartadas comunidades santafereñas, sin embargo a criterio de Urriola se le marginó desde muchos años, porque los representantes de corregimiento que salían elegidos son de partidos de oposición, y como muestra de ello está el camino que va desde la comunidad de El Alto a Gatú, Gatuncito, intransitable, sólo para vehículos reformados y con cadenas para entrar y salir en casos de urgencias.