Localizado en el centro de la ciudad de Panamá, rodeado de una arquitectura monumental única que por más de 4 siglos se ha convertido en mudo testigo de nuestra historia patria, se encuentra el corregimiento de San Felipe.
El lugar que alberga la mayor parte del Casco Antiguo de la ciudad, y cuyo corregimiento fue fundado el 29 de abril de 1915, con el paso de los años, pareciera ver desaparecer a sus pobladores.
Actualmente la autenticidad de aquel poblado pintoresco, bordeado por nuestras costas y que cuenta con varios templos religiosos y torres majestuosas, ha sido invadido por empresarios extranjeros y nacionales, convirtiéndo el área en una exclusiva zona turística.
Para el representante de este corregimiento, Mario Kennedy, cuando se habla de San Felipe, "lo único que viene a la mente de la gente es la restauración del patrimonio histórico, pero: �qué pasa con el patrimonio humano?, nadie piensa en eso", se pregunta el edil.
UNA PUERTA DEL TIEMPO LOS DIVIDE
De acuerdo a Kennedy, el advenimiento de más empresarios interesados en invertir en San Felipe, ha provocado que a la gente del barrio los estén "orillando a irse más hacia las afueras".
Hace un par de años, la cantidad de habitantes sumaban unos 9 mil, ahora si acaso llegan a 4 mil.
"Somos como una puerta del tiempo, los de afuera y los de adentro, porque somos pobres tenemos que vivir de calle quinta hacia allá. Cada vez se van tomando mas propiedades y menos personas tienen acceso a una casa digna en San Felipe", acotó el representante.
Aseguró que nadie de poca solvencia económica puede comprar un terreno, porque están muy costosos.
NO HAY INCENTIVO
Vivir hoy en San Felipe es un lujo que pocos panameños se pueden dar, porque según el representante Kennedy, las empresas que promueven sus proyectos no brindan ningún tipo de incentivo a los que menos tienen. Le preocupa los mochileros que visitan el área.