Desde hace más de 15 años, Estados Unidos le mantiene un embargo comercial a Panamá por la pesca de atún asociada a los delfines, confirmó Arnulfo Franco, director de la Fundación Internacional de Pesca.
A finales de la década de los 80� y principio de los 90�, cuando se dio inicio a la pesca de atún asociada a los delfines, había una gran mortalidad y Estados Unidos establece una legislación en la cual se crea un mecanismo legal que impide la importación de este producto, explica Franco.
A pesar de que Panamá, México, Colombia, Venezuela y otros países dedicados a esta actividad pesquera han firmado varios acuerdos internacionales sobre la conservación de los delfines y han presentado diversos informes científicamente que comprueban que esta práctica no los afecta, se mantiene el embargo.
No obstante, los norteamericanos sí permiten la importación de atún procedente de la pesca libre y la asociada a plantados o efectos flotantes.
Con la firma en 1995 de la Declaración de Panamá en donde participaron diversos países involucrados en este negocio, se ha disminuido la muerte de los delfines por la pesca; sin embargo, ambientalistas estadounidenses promovieron un proceso ante la Corte de San Francisco que reafirmó la dureza en torno al embargo.
El acuerdo internacional para la conservación de los delfines estipula que la etiqueta "Dolphin Safe" es atún capturado en asocio con delfines con los que no ha ocurrido mortalidad o herida grave que ocasione la muerte de estos mamíferos.
En sus principios, este embargo afectó a la economía panameña; sin embargo, se han abiertos mercados muy interesantes con gran demanda, como lo es el europeo, concluyó el experto en pesca de atún.