La ex Spice Girl, Melanie Chisholm, se vio obligada a abandonar el concierto de Bruce Springsteen, en Londres, antes de que acabara porque no dejaba de preocuparse de su pequeña bebé.
La cantante se había tomado la noche libre de cuidar a su pequeña de cuatro meses de edad, Scarlet, y la dejó al cuidado de la niñera para divertirse en el concierto, pero su amor de madre pudo más y se retiró para estar con la pequeña.