Confusión y largas horas de espera caracterizaron el proceso de regulación extranjera "Panamá-Crisol de Razas", organizado por el Servicio Nacional de Migración.
Rodeados de un fuerte operativo de seguridad, más de 4 mil extranjeros abarrotaron ayer las inmediaciones de Atlapa con la finalidad de participar en dicha moratoria.
A medida que iban pasando las horas, nicarag�enses, colombianos, dominicanos, hindúes, chinos y personas de otras nacionalidades mostraban rostros de cansancio, fatiga y desesperación porque las filas parecían interminables.
Incluso había personas que desde la noche anterior habían dormido en los alrededores del Centro de Convenciones para ser los primeros, pero ayer unos que llegaron a última hora intentaron colarse y se formó una empujadera, por lo que tuvo que intervenir la policía para poner orden.
Olga García y su esposo, ambos de nacionalidad colombiana, señalaron que la iniciativa es muy positiva, pero faltó más organización.
"Estamos aquí desde las siete de la noche del jueves porque queríamos ser de los primeros, pero todavía estamos haciendo fila, y nada que llegamos", expresó Olga.
En tanto, la nicarag�ense Sonia Amador mostró gran preocupación porque sólo traía en su cartera $ 200, pero, al parecer, cuando llegó al lugar le dijeron que tendría que pagar más de $ 700.
Evidentemente, la mayoría de los entrevistados por Crítica, coincidían en que faltó una jornada de orientación porque muchos extranjeros no contaban con el dinero necesario para realizar sus trámites, a pesar de que llevaban toda la documentación requerida.
Con el pasar de las horas, la impaciencia y el calor comenzaron a vencer a muchos de los extranjeros, quienes decidían sentarse en algún rincón para comer algo.
Pero no todo fue malo. Porque los que sí aprovecharon el tumulto de personas fueron algunos vendedores del sector informal.
Cabe señalar que en el interior del Centro de Convenciones, la situación se tornaba un poco diferente, ya que los extranjeros entraban por grupos de 150.
Conjunto
Unos 900 funcionarios de Migración participaron en la actividad y a eso de las 12 mediodía el sistema estaba saturado, razón que motivó a las autoridades a realizar los procesos de manera manual.Mientras, en la planta alta había funcionarios de Notaría, Registro Civil, Caja de Seguro Social y el Banco Nacional.