Camilo Manzilla, de 28 años y residente en Nuevo Arraiján, fue acribillado de siete disparos que le propinaron dos menores de edad.
El hombre moribundo fue trasladado por familiares en un taxi a la Policlínica Blas Gómez de Arraiján, pero todo fue inútil.
La Policía Nacional logró capturar a dos menores de edad. El homicidio guarda relación con un ajuste de cuentas.