Hoy termina el primer semestre de Raúl Castro como presidente titular de Cuba, periodo con más expectativas de cambio que reformas concretas del sistema que cumple 50 años en enero próximo, pero muchos "cubanólogos" coinciden en que el país ya no es el mismo.
Analistas y diplomáticos apuntan que hay un cambio real: Fidel Castro ya no es presidente, pero aclaran que se debe a la enfermedad que padece desde 2006 y no a una voluntad política reformista.
Fidel Castro ya no controla personalmente el día a día de cada cubano, como en los 49 años y 55 días en los que tuvo todo el poder. Unos afirman que Raúl Castro hace lo que dicta desde la cama el octogenario; otros juran que Fidel está ya "out"; algunos dicen que es incapaz de tener las riendas, pero que su hermano y los demás dirigentes le tienen tanto respeto y temor que no se atreven a hacer nada que pudiera disgustarle.