El ministro de la Presidencia, Jimmy Papadimitriu, defendió ayer la compra de un nuevo avión presidencial valorado en $17.9 millones, alegando que se necesita contar con una aeronave segura que permita el traslado de personas, especialmente niños que requieran atención médica urgente en el extranjero.
"El Presidente no es el único que viaja en el avión presidencial, y es injusto que panameños que necesitan viajar urgente para recibir una atención médica tengan que arriesgar sus vidas en un avión que es obsoleto. El Presidente ha dicho que si él se muere en un accidente aéreo, el país tiene un Vicepresidente, pero, �qué le decimos a una familia que pierde un hijo?", preguntó el Ministro de la Presidencia.
Según Papadimitriu, el avión presidencial presentó problemas y "no queremos que se repita un caso tan lamentable como el ocurrido con el helicóptero SAN 100, en el que personas inocentes perdieron la vida y el Estado tendrá que pagar $8.4 millones en ayuda a las familias de las víctimas.
Según el funcionario, el avión Gulfstream II (avión presidencial), de 1969 y que fue comprado en 1995 en $7.3 millones durante la administración del mandatario Ernesto Pérez Balladares, no cuenta con piezas nuevas en el mercado y debido a su antig�edad consume mucho combustible y su operación representa un gasto de más de $10 mil la hora de vuelo. Además, no está permitida su operación en varias regiones como en Europa.