Noventa mil dólares fueron hurtados ayer de un cajero automático propiedad del banco HSBC, en la Plaza El Conquistador.
El atraco ocurrió a las 10:00 a.m., cuando un sujeto se hizo pasar por empleado de la compañía encargada de reparar la alarma del aparato.
El delincuente, con implementos y uniforme de la empresa, se tomó todo el tiempo necesario para depositar el botín en lo que se suponía era la bolsa donde llevaba las herramientas.
Una fuente reveló que para abrir y cerrar estos cajeros se necesita una llave y una combinación, y al parecer los encargados de reabastecer con dinero el mismo, supuestamente no lo cerraron bien.
El hurto fue descubierto cerca de las 6:00 de la tarde, cuando los verdaderos trabajadores que iban a reparar la alarma del cajero, encontraron que lo habían saqueado.