Otro mes de noviembre se acerca. Otra vez las importantes fechas que nos hacen recordar momentos importantes que nos definieron como nación. Y una vez más la desesperación por nuestros muchachos, a quienes parece no importarles la historia; viven las fechas patrias como si tan sólo fueran momentos de solaz y vacaciones, sin interesarse por conocer los personajes y los episodios que desembocaron en la constitución de la nación panameña.
Pero es que los adultos tampoco nos interesamos por la historia. Muy pocos se dedican a investigar los hechos pasados, lejanos o no, que fueron el antecedente de la realidad de hoy. En las escuelas, primarias y secundarias, la historia se presenta como una materia fría y aurrida, y los docentes no se entregan a ella como la fuente de vida y emociones que es. Por supuesto, los muchachos responden con tibieza al tema, y tratan de evadir de la manera que sea el compromiso de conocer la verdad tal como la muestran los historiadores.
Pero �por qué es importante la historia? Hasta resulta penoso repetir que quien ignora la historia, se condena a repetir los errores, y se niega la posibilidad de enmendar entuertos cometidos. �No creen que hoy en día estamos cometiendo los errores que desencadenaron la dictadura militar de Torrijos y Noriega? �Mucho ojo! |