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No cabe duda que nuestra República ha sido bendecida durante estos cien años por la protección de Dios. Por esta suerte divina, cientos de panameños unieron sus plegarias para rendir un minuto de oración a la patria, donde expresaron sus mejores deseos para lograr alcanzar una patria sin exclusiones y en igualdades sociales.
La plegaria estuvo a cargo de Monseñor José Dimas Cedeño, quien indicó que en nuestro país no deben haber marginados, ni excluidos en el desarrollo de un patria que está creciendo.
Igualmente, pidió al Altísimo que guarde nuestra patria de tragedias naturales y a cada uno de los habitantes de esta Nación.
Monseñor resaltó que es necesario que se respeta la vida humana pese a sus orígenes hasta su ocaso natural.
"Que cese la violencia física, moral y psicológica entre nosotros", aseveró.
Expresó que tanto niños, jóvenes, ancianos, hombres y mujeres deben poder disfrutar de los beneficios de la salud, la paz, la justicia, la cultura, la educación y la prosperidad.
CEDE�O: DEBE HABER MAS RESPETO
Dimas Cedeño manifestó que luego de los cien años de vida Republicana cumplidos debemos respetar como ciudadanos las culturas y costumbres de las etnias que habitan nuestro territorio para seguir creciendo como país.
"Oh Dios, ayúdanos a fortalecer la familia como santuario de la vida", dijo.
Señaló que es necesario fortalecer las bases de las instituciones sociales, políticos, religiosas y económicas para la promoción integral de la vida de todos los panameños.
Apoyado por las plegarias de buena fe, el prelado recomendó que cada panameño debe actuar con optimismo y entusiasmo para desarrollar un proyecto nacional que nos lleve al "campo feliz de la unión", capaz de darnos la capacidad de soñar con la patria grande del siglo próximo. |
