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Aunque las pérdidas de potencias tienen diferentes causas, es probable que en varios casos, el problema esté en las bujías  |
Las bujías son los pequeños conductores que llevan la electricidad desde el exterior hasta la cámara de combustión del motor. La chispa que salta en su extremo interior enciende la mezcla de aire y gasolina que mantiene trabajando la máquina.
Una bujía se mantiene en estado deficiente cuando el paso de la corriente se dificulta, lo que puede ocasionar un descenso considerable del rendimiento del motor.
Aunque las pérdidas de potencias tienen diferentes causas, es probable que en varios casos, el problema esté en las bujías.
Pero, para revisar las mismas, es necesario que cada paso lo haga con precaución, pero sobre todo, conocer qué tipo de bujía son recomendadas para su vehículo, también observar que las roscas vienen en diferentes tamaños.
Al querer realizar el cambio de bujía, tome en cuenta los siguientes pasos.
Realice la operación bujía por bujía para no tocar el orden de encendido. Retire el cable de la bujía sujetándolo por la funda de protección. Desajuste con una llave especial para bujías. Si los electrodos presentan desgastes o excesivos residuos de carbón u otros depósitos, no dude en cambiarla. Con un juego de láminas calibradoras, verifique la distancia sugerida por el fabricante del automóvil, que aparece en el manual del conductor. Coloque la arandela de seguridad con el borde de plano hacia la cara de la bujía. Ajuste la punta del terminal con unos alicates. Instale a mano la bujía. Intente alinear las roscas con suavidad, y métala hasta que ajuste. Finalmente, apriétele fuertemente con la ayuda de una llave/especial para bujía) haciendo fuerza hacia la derecha.
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