El presidente saliente de EE.UU., George W. Bush, se comprometió ayer a facilitar una transición de Gobierno efectiva y a mantener informado a su sucesor, el demócrata Barack Obama, hasta que este asuma su cargo el próximo 20 de enero.
Una transición con éxito será una prioridad en la última etapa de la administración Bush, dijo el presidente en su discurso radiofónico semanal.
Bush destacó que la nación se encuentra en una situación delicada en lo que se refiere a la economía y que el nuevo presidente también tendrá que asumir que Estados Unidos es un "país en guerra".
Indicó que su administración "trabajará arduamente para garantizar la transición al próximo presidente y que su equipo esté preparado para trabajar desde el principio con éxito".
"Cuando llamé al presidente electo (Barack) Obama para felicitarlo por su victoria histórica, le dije que puede contar con mi plena cooperación en su transición a la Casa Blanca", dijo Bush. "Asegurarme de que esta transición es perfecta es una prioridad durante el tiempo que me queda en el cargo", agregó.
