Miembros del Comité de Familiares de Pacientes por el Derecho a la Salud y a la Vida cerraron, ayer, la vía Transístmica, durante más cinco horas mostrando su descontento en torno a decisiones asumidas por la Caja de Seguro Social (CSS), las cuales calificaron como inconsultas y arbitrarias.
El cierre de la Transístmica provocó un descomunal tranque en la ciudad capital.
Las víctimas afectadas por el dietilenglicol rechazaron la propuesta del nuevo modelo de atención, a través de la asignación de un "médico de cabecera".
Pero, además, exigen la restitución de Gabriel Pascual como administrador del Centro Especializado de Toxicología, quien es acusado de incumplir con las tareas asignadas.
Daniel Sarmiento, directivos del comité, denunció que la reunión que sostuvieron con los directivos de la CSS fue un "engaño" porque los afectados necesitan algo más que un "médico de cabecera".
Explicó que por ley tienen derecho a la atención de médicos especialistas, a la consecución de citas médicas y a la dispensación de los medicamentos de forma expedita.
Sarmiento afirmó que la destitución de Pascual es una "extorsión" porque están viendo que él y los demás miembros del grupo "sí estamos luchando por los derechos de los pacientes".
En tanto, Guillermo Sáez Llorens, director general de la CSS, confirmó la remoción de Gabriel Pascual por incumplir metas como: "carnetización" de los pacientes y rendir un informe de dónde se formaba el "nudo crítico" en la atención médica.
"No podemos tener a una persona que actúa en contra de su propia gente, y que mantiene un doble discurso: uno adentro y otro afuera", dijo.
Sáez Llorens adelantó que a fin de mes inaugurará el Centro de Toxicología.