Tres accidentes de gran magnitud que milagrosamente no cobraron víctimas fatales, ocurrieron entre la mañana del domingo y la del lunes, en los corregimientos de Juan Díaz, Tocumen y en el puente elevado vehicular de San Miguelito.
En el primero de los casos, ocurrido antes que saliera el sol, a las 5:45 de la madrugada del domingo, un hombre que conducía un auto sedán con placa 428533, al parecer se quedó dormido al volante cuando viajaba por la vía José Agustín Arango, y fue a dar al paño contrario chocándose con un "diablo rojo" de la ruta Felipillo-Vía España, que se encontraba estacionado en la parada.
El conductor no sufrió mayores traumas, sino un simple susto, y según testigos, el hecho de que el bus estuviera estacionado en la parada evitó que el carro se fuera contra la misma en donde se encontraban algunos peatones.
Por otro lado, en el puente de San Miguelito, un bus de la ruta Veranillo-Tumba Muerto, y tres vehículos se vieron involucrados en una colisión múltiple que dejó a una persona herida.
El accidente ocurrió a las 6:30 de la mañana cuando la conductora de un sedán se detuvo a la mitad del puente al sufrir desperfectos mecánicos y fue chocada por otro auto que a su vez perdió el control y quedó montado en una de las líneas divisorias de la estructura.
Inesperadamente, un "diablo rojo" salió a escena y golpeó a los vehículos ya accidentados y a otro más.
A las 9:45 de la mañana del lunes, en la vía Domingo Díaz, próximo a la entrada de la barriada Torremolinos, un "diablo rojo" con placa 8B-731, de la ruta Tocumen-Vía España colisionó a un Mitsubishi Lancer, llevándose una cerca y cruzándose al paño contrario que conduce al centro de la ciudad.
En el percance resultaron heridos de consideración el conductor del colectivo Benjamín Ríos y su pasajera Marisol Molina.
VICTIMAS:SE RECUPERAN
En 48 horas se registraron cuatro heridos, los cuales, hasta ayer, al cierre de edición, se encontraban fuera de peligro, pero los daños a los vehículos golpean el presupuesto de los panameños, lo que se puede evitar con prudencia.