|
EDITORIAL
Junta Nacional de Escrutinio
La designación de la Junta Nacional de Escrutinios debe ser conformada por figuras que proyecten confianza y sean garantías de que los resultados de los comicios de mayo de 2004 serán respetados.
Se debe garantizar la independencia del Tribunal Electoral para nombrar a los miembros de esa instancia y, en ese sentido, los partidos políticos deben colaborar para evitar todo tipo de influencia sobre sus decisiones.
Hay que entender que el Consejo Nacional de Partido Políticos es apenas un órgano de consulta del Tribunal Electoral y que al final serán los magistrados los que designen a los integrantes de la Junta Nacional de Escrutinio.
Los que conformen dicha Junta deben tener claro que tendrán que desempeñar sus funciones con la mayor transparencia y no permitir influencia externa, salvo respetar la voluntad popular.
Desde 1990 a la fecha, hay que reconocer que en los diversos comicios y consultas populares se han respetado los resultados, incluyendo los triunfos de la oposición al gobierno de turno.
Las fuerzas políticas existentes en el país deben entender que el panameño ya se acostumbró a la democracia y que el torcer los resultados de cualquier torneo electoral ya no tiene cabida.
Los pie de guerra y los grupos paramilitares que salían a las calles para perpetrar el robo de urnas y amedrentar a los votantes no pasarán, porque la ciudadanía los rechaza.
Reiteramos la necesidad de que el Tribunal Electoral y la Junta Nacional de Escrutinio cumplan a cabalidad sus funciones y que al final se le reconozca el triunfo a los candidatos que logren el respaldo popular.
|
PUNTO CRITICO |
 |
|