La Peste porcina clásica (PPC) es una de las principales enfermedades víricas que afecta al ganado porcino, tanto doméstico como salvaje, y se caracteriza por lesiones de carácter hemorrágico y de curso generalmente fatal en las formas agudas. Con la determinación de mantener la condición de países libres de este mal el Ministerio de Desarrollo Agropecuario MIDA a través de la Dirección Nacional de Salud Animal de Panamá en conjunto con el Servicio Nacional de Salud Animal de Costa Rica, desarrollaron, recientemente, el Primer Simulacro bilateral, con el lema "Cuidando la frontera mantenemos la condición de países libres de Peste Porcina Clásica (PPC)".
El simulacro se llevó a cabo en las instalaciones de la Universidad Nacional (UNA) en Costa Rica, ubicada en la provincia de Corredores y el Campus Coto, aproximadamente a 5 Km. de la frontera con Panamá.
El principal objetivo de esta actividad es mantener la condición de países libres de Peste Porcina Clásica en Panamá y Costa Rica, de igual manera desarrollar el plan de vigilancia epidemiológica a lo largo de la frontera Tico/Panameña.
Nuestro país fue representado por 31 Médicos Veterinarios de las diferentes instancias gubernamentales responsables de salvaguardar la salud humana y animal, así como personal de la Asociación Nacional de Porcinocultores entre otros. De igual manera, la hermana República de Costa Rica, contó con la participación de 37 Médicos Veterinarios.
Este Simulacro se realizó bajo la coordinación del mexicano Roberto Navarro, quien posee un certificado para el reconocimiento de Enfermedades Exóticas de los Animales por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos de Norteamérica (USDA).
Panamá, se autodeclaró libre de Peste Porcina Clásica (PPC) desde el año 2007. Recientemente, Costa Rica se autodeclaró libre, motivo por el que se hace necesario reforzar la vigilancia epidemiológica fronteriza con el adiestramiento y capacitación al personal técnico para hacer frente a la sospecha de un brote de PPC, que pueda poner en riesgo la población porcina nacional con el ingreso de animales enfermos.
En primera instancia, esta enfermedad es restrictiva al comercio internacional y las consecuencias de tenerlas son devastadoras, lo que para la economía panameña sería realmente muy duro.
