El presidente de EE.UU., George W. Bush, se despidió de uno de sus principales amigos en la región centroamericana y firme aliado en Irak, su colega salvadoreño, Elías Antonio Saca, con alabanzas a la firme relación bilateral.
Ambos mandatarios se reunieron por última vez en el Despacho Oval de la Casa Blanca, por espacio de media hora, durante la que abordaron asuntos como la inmigración, la lucha contra el narcotráfico o Irak.
En declaraciones al término de la reunión, Bush expresó a Saca su agradecimiento por el "apoyo a la libertad" en el país árabe y declaró su admiración por la "vibrante democracia" en El Salvador.
"Usted ha sido inquebrantable en su apoyo al derecho de su pueblo a expresarse en una sociedad libre, y le aplaudo por esa firmeza", aseguró Bush, quien también resaltó el "compromiso" del mandatario salvadoreño con un "Gobierno honesto" y la inversión en la salud y la educación de su pueblo.
El gobernante estadounidense exaltó, asimismo, el apoyo de Saca al libre comercio y al tratado comercial entre EE.UU. y los países centroamericanos (CAFTA), que, dijo, "está funcionando muy bien".