El Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses informó los resultados preliminares de las autopsias de varios hechos violentos.
En el caso del asesinato del colombiano Jory Torres Wilson, de 35 años, ocurrido el domingo en El Valle de Urracá, en San Miguelito, se determinó que una herida de proyectil en el cráneo fue la causa de muerte.
Alberto Abad Alonso, de 21 años, cuyo crimen ocurrió el domingo en San Joaquín, falleció por una herida perforante de proyectil en el tórax.
En tanto que el menor Justo José García Martínez, de 16 años, asesinado la madrugada del domingo en El Chorrillo, murió por una herida de proyectil en el tórax.
Se dictaminó que Rafael Moreno, de 39 años, murió de un trauma cráneo encefálico severo, en Chepo.