Los docentes del centro de educación básica general Alejandro Tapia, de Aguadulce, y funcionarios del Ministerio de Educación decidieron suspender las clases por los trabajos de reparación que aún se realizan.
Según los educadores, los estudiantes corren grave peligro si continúan acudiendo al plantel.
Manifestaron que tomaron la decisión luego de que se registrara un accidente.
Alegaron que al parecer, mientras se realizaban unos trabajos de toma de medida de una madera en el segundo piso, esta se desprendió y golpeó las verjas de la ventana de un salón .
"Cuando yo escuché que se rompieron las paletas de vidrio, grité a mis estudiantes que se agacharan. Aunque no hubo heridos, a los niños les cayó los pedazos de vidrio. Esto es un verdadero peligro", aseguró una de las profesoras, un tanto asustada.
Según los docentes, la dirección del plantel no quería que las clases se paralizaran durante los trabajos; sin embargo, tuvo que suspenderlas por la seguridad de los alumnos y el personal administrativo.
SOLUCION
Una de las alternativas para continuar las clases es hacer cubículos en el aula máxima.
Para esto se deberá comprar el material necesario, ya que el que había fue utilizado en la Casa del Pueblo de Pocrí, para que los niños de la escuela Juan Demóstenes Arosemena recibieran sus clases.
Se ha calculado que en el aula máxima caben aproximadamente unos cinco cubículos, mientras que en el espacio de eventos especiales unos cuatro.
El próximo lunes los profesores inspeccionarán los trabajos que se realizan.
SEGURIDAD: PETICION
La profesora Delfina Bernal, directora Regional de Educación en Coclé, conversará con los encargados de la empresa que realiza los trabajos en la escuela para que agilicen las reparaciones, a fin de evitar otro accidente.