ASEGURA CIGARRUISTA Negocian partidas circuitales
Alberto Cigarruista
Rodulfo Barrios V.
Cr�tica en L�nea
El legislador Alberto Cigarruista acept� que s� existieron negociaciones sobre las partidas circuitales entre los colectivos oficialistas y el Partido Revolucionario Democr�tico (PRD), pero neg� que las mismas estuvieran condicionadas a lograr los votos para la aprobaci�n de la "Ley Chorizo". Cigarruista dijo que si bien es cierto se negociaron las partidas circuitales con el PRD, no era necesario que se tratar� de comprar votos, ya que el objetivo que se persegu�a era "sacar" al administrador de la Autoridad de la Regi�n Interoce�nica (ARI), Nicol�s Ardito Barletta y al director del Registro Civil, Alvaro Vissuetti y no fue necesario, porque ambos renunciaron. El legislador destac� que a pesar que no se nombr� a Guillermo Endara, la "victoria" del Organo Ejecutivo es evidente ya que logr� colocar en la Corte Suprema a C�sar Pereira Burgos, obtener la aprobaci�n de la "Ley Chorizo" y del Presupuesto. Seg�n las negociaciones, a los legisladores del PRD le corresponder� B/. 300 mil en l partidas circuitales, mientras que los parlamentarios de gobierno un poco m�s, indic� Cigarruista. "Pese a la manera como se comportaron Laurentino Cortizo, Rub�n Arosemena y Teresita de Arias a ellos les va tocar una partida igual que a los del resto de los legisladores que apoyaron a Endara y que son de la alianza del gobierno" agreg� Cigarruista Acept� tambi�n que existieron "inconformidades" entre los legisladores de gobierno por la manera en que el asesor presidencial, George Weeden, hab�a manejado las negociaciones para obtener los votos que ratificaran al ex presidente Guillermo Endara. Seg�n Cigarruista, "Weeden hab�a asegurado tener los votos para lograr que Endara fuera magistrado, sin embargo, a la hora del conteo esto no sucedi� y eso fue los que los molest�". A cuestionar a Weeden sobre estas "inconformidades", este se�al� que "no se ha peleado con nadie y que tiene muy buenos amigos en la asamblea". Tambi�n neg� que el arnulfismo y su alianza hayan sufrido alg�n desgaste con las discusiones para los nombramientos de Endara y Pereira Burgos.
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