El Director Nacional de Inteligencia de EE.UU., Mike McConnell, considera que la asfixia simulada "sería tortura" si se introduce agua en los pulmones de un detenido bajo interrogatorio, según una entrevista del diario The New Yorker.
"Mi definición de la tortura es algo que causaría un terrible dolor... la asfixia simulada sería terrible. Si a mí me echaran agua en la nariz, oh Dios, no me puedo imaginar lo doloroso que sería", dijo McConnell "No sé si otros lo considerarían tortura, pero para mí lo sería", agregó. Sin embargo, por razones legales, McConnell se negó a comentar si esa técnica constituye categóricamente un método de tortura.
El funcionario explicó que en la asfixia simulada, al prisionero, ya atado, se le cubre la cara con una toallita y posteriormente se le deja caer agua en la nariz a cuentagotas.