Los directivos de la popular feria están haciendo los preparativos para la celebración de este importante encuentro para el productor coclesano.
José Pacheco, director del Ministerio de Desarrollo Agropecuario en Coclé, dijo que el objetivo del MIDA es que los productores puedan vender sus productos, entre los que se encuentran las jugosas naranjas de Coclé, y que los consumidores puedan encontrar un lugar de esparcimiento y obtener las artesanías que exhiben los diferentes artesanos de la región, a buenos precios.
Entre las comunidades que se benefician directamente de la festividad se encuentra el Pajonal, Toabré, Churuquita Arriba, entre otras, y más de 300 pequeños productores.
La reina de esta actividad, la señorita Lisbeth Alejandra, de la comunidad de Churuquita Chiquita de Penonomé, manifestó su entusiasmo para que la diversión no falte en estas fiestas, además agradeció a la Crítica por el apoyo a las actividades que se hacen en el interior.
Según Onofre Núñez, presidente del Patronato de la Feria, que cuenta con 30 años de tradición y que celebra sus bodas de perla, el año pasado esta actividad tuvo un ingreso de más de 22 mil dólares en taquilla y para este año se espera doblar esa cifra.
Actualmente, la feria ocupa un terreno de 11.650 metros cuadrados, los cuales son alquilados y mantienen media hectárea de estacionamiento, además de 25 ranchitos confeccionados con materiales de la región y el apoyo de más de 30 empresas, entre entidades del Gobierno y privadas, listas para participar.
HISTORIA DE TRADICION
La Feria de la Naranja comenzó en 1981, gracias a la iniciativa de un grupo de jóvenes campesinos, entre los que se encontraba Rafael Rivas, Enoch Martínez, Rogelio Mendoza, entre otros miembros de la comunidad.
Ellos se organizaron para construir ranchitos con materia prima de la región (penca de palma, bejuco de vaca, madera de nance colorado, laurel, entre otros) con el objetivo de celebrar bailes típicos; ventas de producción de cítricos, en especial la naranja; ya que era un producto en abundancia y la comercialización de la fruta carecía.