La secretaria de Estado de Estados Unidos, Condoleezza Rice, admitió la necesidad de hacer "ajustes" estratégicos para combatir a los talibanes en Afganistán, país al que visitó sorpresivamente acompañada por su homólogo británico, David Miliband.
"Creo que lo que hemos hecho en la lucha contra la insurgencia en Afganistán está surtiendo efecto, pero el trabajo no está completo", reconoció Rice en rueda de prensa conjunta en Kabul con Miliban y el presidente afgano, Hamid Karzai.
"Ciertamente, tendremos que hacer ajustes, como el enemigo intenta hacer ajustes a estrategias que le han fallado, como enfrentarse a la coalición (internacional) militarmente", añadió la secretaria de Estado, para aludir al aumento de los ataques a civiles, los secuestros y los atentados suicidas.
Rice y Milliban llegaron a Kabul procedentes de Londres, donde la diplomática estadounidense y el primer ministro británico, Gordon Brown, airearon su malestar con los países que rehúsan "compartir la carga" de la misión en Afganistán.
Además de entrevistarse en Kabul con Karzai, los jefes de las diplomacias de Estados Unidos y el Reino Unido visitaron Kandahar para conocer de primera mano la situación de seguridad en el conflictivo sur del país.
Rice destacó que la de Afganistán es "una guerra larga, porque los terroristas no pueden ser derrotados fácilmente".
Miliban, reiteró la "determinación" de su país en la lucha contra el "enemigo común" del terrorismo.
Ambos diplomáticos evitaron reiterar sus críticas a otros socios de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), a las que aludió Karzai para decir simplemente que una "mayor atención" a Afganistán.
SEGURIDAD: LUCHA
3 mil marines se han sumado a los estamentos de seguridad en Afganistán con el fin de revertir que las hostilidades se reanuden en los próximos meses.