A las 7:00 de la mañana de ayer jueves, como estaba programado, inició puntualmente la búsqueda del cuerpo de Epifanio Cruz, quien tenía más de 36 horas de haberse ahogado en las aguas del caudaloso río Chagres.
Personal especializado del equipo de rescatistas del Sistema Nacional de Protección Civil y de la Policía Nacional iniciaron el recorrido en balsas por las márgenes del Chagres.
Pero la jornada de ayer iba a ser la decisiva, y deparaba extrañas situaciones, pues en una especie de acto premonitorio, Karen, de 13 años, por quien su padre dio la vida para evitar que se ahogara, había soñado la noche anterior que el cuerpo de Epifanio estaba enredado en unas piedras cerca de las bases del puente del río, reveló una de sus familiares, mucho antes de que fuera encontrado.
Y fue exactamente cerca de ese lugar, donde buzos de la Policía Nacional, al hacer una nueva búsqueda, encontraron el cuerpo del malogrado hombre enredado entre unos alambres que lo sostenían de uno de los ojales del pantalón, lo que evitaba que saliera a flote.
Tras 15 horas de intensa búsqueda, y cerca de 48 de su desaparición, el cadáver de este padre de seis hijos había sido encontrado.
Salvador Rodríguez, Director Regional del SINAPROC en Panamá Este, reveló que el lugar donde encontraron el cuerpo, ya había sido revisado anteriormente, pero esta vez ingresaron a un sector oscuro donde divisaron una de las plantas del pie del occiso.
Sostuvo que la búsqueda fue intensa, pero se logró el cometido que era encontrar el cuerpo.
En las márgenes del río se encontraba la esposa del occiso, Dominga Rodríguez, quien no pudo contener las lágrimas cuando veía cómo reflotaban el cadáver del hombre que la acompañó durante tantos años y que sin él tendrá que enfrentar de ahora en adelante lo que le depara el futuro junto a sus seis hijos.