Las últimas semanas han sido de tensión entre el gobierno y las poblaciones indígenas.
En medio de este escenario de polémica, el Ejecutivo, a través del Ministerio de Vivienda, volcó hacia las comarcas indígenas su plan de acción social con la ejecución de un proyecto de $2.9 millones para la construcción de 207 viviendas en esas zonas.