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Quince meses antes de las elecciones generales de 2004, ha comenzado la campaña política. El PRD ya ha determinado que escogerá mediante comicios internos o "primarias", tanto a quien encabece su nómina presidencial, como a todos sus candidatos a puestos de elección popular.
El Partido Arnulfista, sin embargo, aún no ha definido el método mediante el cual seleccionará a sus candidatos. Muchos miembros, dirigentes y simpatizantes arnulfistas han expresado su deseo de que el partido opte por las elecciones primarias. En esa dirección se pronunció en David, el jueves pasado (20 de febrero), el legislador Osman Gómez.
Es cierto que en nuestro medio, la mercantilización de la política, el comercio de votos y la compraventa de adhesiones, empañan la transparencia de las elecciones. Son vicios que es preciso superar para asegurar la pureza del sufragio.
A pesar de ello, la elección interna es un método más democrático y, por ello, preferible a la designación de candidatos por la convención nacional o el directorio del partido. Sería muy irónico que el Partido Arnulfista, abanderado de las luchas civilistas por la democracia, la justicia y la libertad, escogiese a su aspirante presidencial por medios menos democráticos que el PRD, brazo civiloide de la dictadura militar.
Muchos miembros y dirigentes del arnulfismo así lo entienden y no quieren que a su candidato lo critiquen por provenir de un "dedazo". En aras del desarrollo democrático del país, debe haber primarias en el Partido Arnufista. |
