Los pilotos suicidas del 11 de septiembre no lograron evitar totalmente a los servicios de seguridad. Según publica 'The Washington Post', nueve de los 19 secuestradores fueron sometidos a más controles de los rutinarios antes de embarcar.
Dos de ellos fueron inmovilizados porque sus documentos de identidad presentaban irregularidades, mientras que otros seis fueron sometidos a un segundo control tras el primer registro.
Los vigilantes llegaron a examinar sus equipajes en busca de explosivos o armas ilegales. El último fue sometido a un control simplemente porque viajaba en compañía de uno de los los anteriores.
Las autoridades no han podido explicar si los encargados de seguridad descubrieron los 'cutters' (exactos) que algunos ocultaban. Lo cierto es que éstos sí estaban permitidos antes del 11 de septiembre. |