Las malas condiciones del edificio Fénix en la provincia de Colón no fueron impedimento para que la producción de la película del 007 se trasladara hasta allá.
En la parte de abajo de este conocido edificio, se instaló una cantina.
El simulacro de cantina fue muy creativo, ya que se pudo observar mesas, sillas, el bar y hasta las personas que lo cuidan.
Lo mejor de todo es que en esta cantina estuvo el mismo Daniel Greig, o sea James Bond, junto a otros reconocidos artistas grabando una escena.
Las grabaciones no han terminado, ayer grabaron frente al Ministerio Público en la Calle 7 de la Avenida Bolívar.
En otra de las escenas iban a utilizar unos 24 ataudes, que serían lanzados desde un camión en marcha. Otro datito interesante es que cada uno de los ataudes le fueron comprados a la Funeraria Auxiliadora Cristo Rey en 400 dólares cada uno.