Graeme Wheeler, director gerente del Banco Mundial, alertó ayer de las posibles consecuencias devastadoras de la subida simultánea del petróleo y los precios de los alimentos en el mundo en desarrollo.
"Los mayores precios de la energía, la sequía y el aumento de la demanda han provocado un incremento del 75% en los precios de los alimentos básicos desde el 2005", afirmó.