El presidente Rafael Correa anunció que emprenderá una nueva ``lucha diplomática'' contra Colombia en caso de confirmarse la muerte del quiteño Franklin Aizalia durante el ataque a un campamento de las FARC, en suelo ecuatoriano, con lo cual se dilata la reanudación de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones.
Correa aseguró que ``quedan muchas cosas por hacer'' en alusión a la denuncia de los padres de Aizalia quienes afirman que el cadáver inicialmente identificado como el del guerrillero Julián Conrado, y que fue trasladado a Bogotá junto al de Raúl Reyes, pertenece a su hijo, un cerrajero reportado como desaparecido hace más de tres semanas.
Los familiares sustentan su versión en fotografías de prensa y viajarán el lunes a Colombia para realizar los trámites de identificación del cuerpo.
De confirmarse la versión se trataría del ``asesinato de un ecuatoriano en suelo de Ecuador por fuerzas extranjeras'', lo cual el mandatario calificó como ``extremadamente grave''.
``Ahí si vamos a empezar una lucha diplomática tremendamente fuerte porque no dejaremos ese asesinato en la impunidad'', añadió.
Correa instó a la Organización de Estados Americanos (OEA) a "actuar de forma contundente" en caso de que se compruebe el hecho.
Sobre el reinicio de las relaciones diplomáticas con Colombia, Correa preguntó: "Cómo vamos a reanudar relaciones si siguen tratando de vincularnos con las FARC para justificar su agresión?". Correa informó que solicitó, a través de la embajada de Argentina en Colombia, la entrega de los documentos que el gobierno colombiano dijo haber rescatado de las computadoras de Reyes, tras el bombardeo al campamento guerrillero el 1 de marzo, tal como lo había prometido en la Cumbre presidencial del Grupo de Río, donde la crisis diplomática regional se dio por superada.
ESTUDIANTES MEXICANAS
Ana María Ramírez (d) muestra la imagen de su hija, Verónica Natalia Velázquez (d), muertas en uno de los campamentos de las FARC.