Desde tempranas horas de la mañana de ayer, se reanudaron las clases en el colegio Comercial Panamá sin mayores anomalías.
La situación se tornó tensa en la jornada de la tarde, cuando un grupo de padres de familia solicitaba a las autoridades de Educación, que les garantizarán las clases a sus hijos, y que los profesores que no trabajen, sean reemplazados.
Al lugar llegó la viceministra de Educación, Mirna de Crespo, quien explicó a los acudientes que en conjunto con la Contraloría, realizan auditorías para saber cuántos docentes están laborando y cuántos no.
De Crespo dijo que las puertas al diálogo están abiertas, y en cuanto a las posibles destituciones, aclaró que "el MEDUCA no puede actuar a la ligera, hay que seguir procesos".