Un tribunal venezolano condenó ayer a 30 años de prisión a tres jefes policiales de Caracas por su responsabilidad en los asesinatos que precedieron al golpe de Estado de abril de 2002 contra el presidente Hugo Chávez.
Antonio Molina, abogado de las víctimas del 11 de abril de 2002, dijo a la prensa que la juez Maryori Calderón condenó a Iván Simonovis, Lázaro Forero y Henry Vivas, jefes de la Policía Metropolitana (PM), por ocho de los 19 asesinatos que se registraron ese día en el centro de Caracas.